
Publicado en el centenario de la ordenación de san Josemaría Escrivá, el libro explora su enseñanza sobre la espiritualidad laical, donde destaca la llamada de los laicos a la santidad y a la misión apostólica en la vida cotidiana.
Este libro ve la luz en el centenario de la ordenación sacerdotal de san Josemaría Escrivá de Balaguer, fundador del Opus Dei y maestro de espiritualidad laical y secular.
El papa Benedicto XVI hizo colocar su imagen en la Basílica de San Pedro con unas palabras de Jesús Yo, cuando sea levantado de la tierra atraeré a todos hacia mí (Jn 12,32) que entrañan el corazón de su enseñanza.
Ese corazón lo constituyen los dones recibidos en el Bautismo: la filiación divina adoptiva, el sacerdocio común y la herencia de los hijos de Dios: todas las realidades creadas que los laicos están llamados a santificar tratando de ser contemplativos y de realizar la
misión apostólica en su vida diaria. De esos dones trata este libro.
Cómo fue la mirada del fundador del Opus Dei sobre la liturgia, y sobre la Misa como corriente trinitaria de amor. Así se explica en este libro, al hilo de su biografía y del contexto del Concilio Vaticano II.
El autor explora la relación del fundador del Opus Dei con la liturgia, al hilo de su biografía y del contexto del Concilio Vaticano II. Se detiene así a considerar la Misa como corriente trinitaria de amor, y centro y raíz de la vida del cristiano, que debe prolongar su efecto durante toda la jornada.
Para ello, recurre a abundantes citas textuales de san Josemaría y, al hilo de ellas, ofrece un comentario detenido de la Santa Misa.
JUAN JOSÉ SILVESTRE (1973) es licenciado en Derecho y en Historia de la Iglesia. Sacerdote, doctor en Sagrada Liturgia por el Pontificio Istituto Liturgico SantAnselmo de Roma, ha sido profesor de Teología litúrgica en la Pontificia Universidad de la Santa Cruz y consultor del Ufficio Celebrazione Liturgiche del Sommo Pontifice y del Dicasterio del Culto Divino. En la actualidad es profesor de Liturgia en la Facultad de Teología de la Universidad de Navar
La oración es uno de los tesoros más sublimes porque supone tener hilo directo con Dios, y este libro nos ayudará a descubrir sus diferentes facetas.
«Donde esté tu tesoro, allí estará tu corazón», nos dice Jesús en el Evangelio. La oración es uno de los tesoros más sublimes porque supone tener hilo directo con Dios. Si la fe cristiana es un encuentro, la oración es el cauce.
En esta obra, Jacques Philippe y varios autores más nos ayudarán a descubrir las diferentes facetas de la oración y los medios que la Iglesia nos ofrece para alimentarla y hacerla parte de nuestra vida.
Vicente Bosch, Santificare il mondo dall'interno, Corso di spiritualità laicale, Rialp.
«Bisogna respingere il pregiudizio secondo cui i semplici fedeli dovreb-bero limitarsi ad aiutare il clero in attività di carattere ecclesiastico.(…) Il modo specifico che hanno i laici di contribuire alla santità e all’apos-tolato della Chiesa è la loro libera e responsabile azione all’interno delle strutture temporali, nelle quali essi infondono il lievito del messaggio cristiano». (San Josemaría Escrivá, Colloqui, nn. 59 e 303 [1968]).
«Molte volte siamo caduti nella tentazione di pensare che il laico im-pegnato sia colui che lavora nelle opere della Chiesa e/o nelle cose della parrocchia o della diocesi, e abbiamo riflettuto poco su come accom-pagnare un battezzato nella sua vita pubblica e quotidiana; su come, nella sua attività quotidiana, con le responsabilità che ha, s’impegna come cristiano nella vita pubblica. Senza rendercene conto, abbiamo generato una élite laicale credendo che sono laici impegnati solo quelli che lavorano in cose “dei preti”, e abbiamo dimenticato, trascurandolo, il credente che molte volte brucia la sua speranza nella lotta quotidiana per vivere la fede».
(Francesco, Lettera al Card. Oullet, Presidente della Pontificia Commissione per L’America Latina, 19.3.2016).
Hace casi cien años, san Josemaría recibió un carisma: difundir la llamada a la santidad en medio de las circunstancias ordinarias de la vida. Esto implica santificar todas las dimensiones sociales de la existencia.
El buen cristiano, si vive de acuerdo con su fe, es también un buen ciudadano, que contribuye sinceramente al bien común de la sociedad. Mariano Fazio ofrece una visión sintética del legado social del fundador del Opus Dei. “El cristiano que, coherente con el Evangelio y bien formado en la doctrina social, procura influir en la comunidad, con responsabilidad social, respeto a la libertad de los demás, capacidad de diálogo, espíritu de servicio y compasión activa por los más pobres, es un generador de cambios positivos”.
Siguiendo la línea de Transformar el mundo desde dentro (Palabra, 2019), este breve libro invita a la acción, inspirándose en numerosos textos de san Josemaría que son aplicables al mundo actual, lleno de dolor y sufrimiento, pero abierto también a la esperanza y a la alegría.
Este libro analiza el interés de papas, obispos y sacerdotes por la santidad y el asociacionismo del clero en el siglo XX. También el Opus Dei les brindó ayuda y compañía.
Desde 1952, con la aprobación de la Santa Sede, los sacerdotes diocesanos pueden vincularse con el Opus Dei. Desde entonces, varios miles de ellos han pertenecido a esta institución o se han beneficiado de su carisma a través de la Sociedad sacerdotal de la Santa Cruz.
Este libro analiza el interés de papas, obispos y sacerdotes por la santidad y el asociacionismo del clero en el siglo XX, hasta el concilio Vaticano II. También el Opus Dei les brindó ayuda y compañía. Aquí se narra por vez primera qué movió a Escrivá de Balaguer a interesarse por el clero diocesano, quiénes fueron sus colaboradores en esa tarea, y a qué obedeció la acogida y el rechazo que la Sociedad sacerdotal tuvo entre curas y obispos españoles.
Aproximación básica a la liturgia como celebración del misterio de Cristo para la vida de la Iglesia.
Este libro ofrece una aproximación básica al misterio del culto. Al hilo de las aportaciones del Concilio Vaticano II y del Catecismo de la Iglesia Católica, considera la liturgia como celebración del misterio de Cristo para la vida de la Iglesia. Por ser una iniciación, aborda sólo cuestiones que están en el núcleo del hecho litúrgico. Cierran el estudio unos apuntes sobre la vida litúrgica, por su carácter de fuente y culmen de la existencia cristiana.
La Ética es una doctrina sobre las virtudes, sobre la perfección o plenitud a la que puede y debe llegar el hombre. Así lo muestra Pieper.
Este libro recoge en un solo volumen monografías sobre cada una de las virtudes teologales y morales. Desde su publicación se ha convertido en un clásico, y su sólido estudio sobre los fundamentos de la Antropología y de la Ética ha suscitado el interés de numerosos lectores en todo el mundo. Su valor se extiende también al ámbito de la Teología moral, la Pedagogía, la Psicología, la Filosofía social y muchas otras ciencias humanas.
Como dice su autor, la Ética es algo más que una doctrina sobre la acción del hombre, sobre lo permitido y lo prohibido; el punto de arranque es el ser del hombre, y así la Ética o Moral presenta un despliegue de las posibilidades humanas, y una doctrina sobre las virtudes y sobre la perfección o plenitud a la que puede y debe llegar el hombre.
Son disidentes y sus vidas muestran la fe de una Europa desconocida, llena de vigor y creatividad, que contrasta con la decadencia y el cansancio vital de tantos otros lugares de Occidente.
Para reunir esta galería de relatos inolvidables, el autor ha viajado durante tres años por Estonia, Letonia y Lituania, y el sur de Noruega y Finlandia, hasta la frontera con Rusia. Algunos de sus personajes han sufrido cárcel, destierro o tortura. Otros han padecido el ostracismo social y las deportaciones a Siberia. Todos han tenido que enfrentarse a lo políticamente correcto. Son músicos, pintores, directores de cine o actores de teatro. Otros, reporteros de guerra, médicos, católicos, ortodoxos o luteranos, cantantes de rock o de rap. Les une su rebeldía y su fidelidad a las propias convicciones. Son... disidentes.
Sus vidas muestran la fe de una Europa desconocida, llena de vigor y creatividad, que contrasta con la decadencia y el cansancio vital de tantos otros lugares de Occidente.

