
Partiendo de la base de que las modas culturales suelen llevar el sello de la sensibilidad de la época; supuesto, además que la postmodernidad, más que un "tiempo", es un "talante", y un talante que supone la pérdida de confianza en la razón con la que andaba la modernidad; y teniendo en cuenta, por fin, que el cristianismo es fundamentalmente la oferta y la tarea del Reino de Dios (un movimiento de transformación radical de la realidad social e individual que exige la liberación interior y exterior), Jose Mª Mardones pretende en este libro dialogar con la postmodernidad, con el objeto de conocer y diagnosticar mejor a nuestro tiempo y con el deseo de atisbar, tras la moda teórica, una mejor comprensión de nuestro momento histórico, escuchar las preguntas fundamentales de nuestro tiempo y confrontarlas con la fe cristiana. En una primera parte, "Modernidad y postmodernidad", trata de ofrecer una aproximacion a este último fenómeno, abonando el terreno para, en una segunda parte ("Postmodernidad y cristianismo"), abordar una confrontacion entre ambos. El autor es consciente de que el diálogo entre sensibilidad postmoderna y cristianismo tiene un futuro muy precario, y que tal vez sólo pueda florecer en la marginalidad de la institución. Pero cree también que sería muy importante discutir con los postmodernos acerca de "los contenidos y límites de la modernidad", porque nos va en ello la credibilidad del cristianismo en cuanto religión reconocedora de los derechos de la razón dialogante y crítica y porque, además, en un momento socio-cultural de evidente crisis y replanteamiento de la razón ilustrada, el cristianismo podría aparecer como una tradición colectiva de la humanidad capaz de aportar un inmenso caudal de imaginación utópica y de impulsos emancipadores y humanizantes. La nueva universalidad ilustrada -concluye el autor- no puede construirse al margen de lo religioso cristiano.
JOSE Mª MARDONES es investigador en el Instituto de Filosofía del CSIC (Madrid). Atento a los problemas que suscitan la sociedad y la cultura moderna en relación con el cristianismo, ha publicado en esta editorial: Postmodernidad y cristianismo, Capitalismo y religión, y Fe y política, ¿Adónde va la religión?, Síntomas de un retorno, Utopía en la sociedad neoliberal, Neoconservadurismo, La religión del sistema, Por una cultura de la solidaridad y La vida del símbolo.
Tiene el cristianismo algo positivo y original que decir acerca del mundo de la naturaleza o, por el contrario -como han afirmado muchos-, justifica nuestra despiadada explotación de los recursos medioambientales? Se ha solidado acusar a la tradición judeo-cristiana de alentar la dominación del hombre sobre el resto de la creación, de concebir la naturaleza como "caída" y profana y de considerar la salvación individual como lo único verdaderamente importante.
Observando lo que la Biblia dice realmente sobre estos temas y examinando las tradiciones de los Padres de la Iglesia, de la Ortodoxia oriental y de la espiritualidad medieval, Ian Bradley muestra cómo el cristianismo es, de hecho, una auténtica fe "verde" que ha sido deformada por influencias ajenas a ella y por el implacable egoísmo de la especie humana.
Valiéndose de una serie de intuiciones derivadas de la ciencia moderna -la física cuántica, la nueva biología, la teología dinamicista...-, este libro trata de rescatar el "verdor" del cristianismo, describiendo a Dios como el Creador que cuida y sustenta en su ser a todas sus criaturas, y a Jesús como el Cristo cósmico.
Ian Bradley, ministro de la Iglesia de Escocia, es muy conocido en Irlanda por sus escritos y por sus colaboraciones radiofónicas.
Contra la apatía dominante y la confusión generalizada acerca de lo que es bueno o malo, correcto o erróneo en términos éticos y morales, L. Boff ofrece unas reflexiones que aportan claridad y motivaciones para un comportamiento ético y moral responsable y a la altura de los desafíos contemporáneos. Partiendo de las experiencias originarias que se dan en la vida diaria de las personas, trata de identificar los fundamentos de la ética y de la moral, como cuidar, compadecerse, solidarizarse, etc.
De este modo vuelve a situar la ética y la moral en la vida y en la práctica, pues ése debe ser su lugar, haciendo que las personas se sientan estimuladas a ser mejores, más responsables, más solidarias y más respetuosas de la complejidad y belleza de la naturaleza.
No se trata de pensar en las virtudes, sino de ser virtuosos. LEONARDO BOFF, teólogo y escritor brasileño, nacido en 1938, autor de más de 60 libros, es actualmente profesor emérito de Ética y de Ecología en la Universidad del Estado de Río de Janeiro y miembro de la Comisión de la Tierra. La Editorial Sal Terrae ha traducido alguno de sus principales textos, ha publicado últimamente Tiempo de trascendencia; Espiritualidad: un camino de transformación; Fundamentalismo: la globalización y el futuro de la humanidad; Experimentar a Dios y Del Iceberg al Arca de Noé: el nacimiento de una ética planetaria.
La esperanza pertenece al grupo de vivencias fundamentales que movilizan la existencia y cuestionan el sentido. Durante siglos su tratamiento estuvo muy recluido en el tratado moral de las virtudes. Nuestro tiempo, roto por duros horrores el optimismo fácil de la Ilustración, la ha convertido en preocupación primera, interrogante común y tarea unitaria. Una “elpidología” actual debe tener en cuenta las diferentes respuestas, que van desde las utopías totalitarias hasta la desesperación del absurdo, pasando por el “trascender sin transcendencia” y las respuestas propiamente religiosas. Es en ese ambiente donde la respuesta cristiana debe mostrar su sentido y su aportación. Sólo será creíble y efectiva si, entrando en diálogo con las demás, se muestra capaz de contribuir a hacer más plena y auténtica –más humana- la común esperanza que habita la entraña íntima de todos los hombres y mujeres.
Aclarar el esquema básico de la esperanza bíblica es el segundo problema abordado. La secuencia mítica paraíso-caída-castigo-redención tiene hoy efectos devastadores para una conciencia crítica. El libro trata de mostrar que en la fidelidad de Dios que crea por amor y acompaña el crecimiento humano encuentra la conciencia cristiana un esquema distinto y un motivo capaz de sostener la esperanza sin anular ni el esfuerzo de la libertad ni la ambigüedad de la historia. El último problema confronta la esperanza con la terrible experiencia del mal, que amenaza con reducirla a mera especulación o a simple proyección. En la dialéctica cruz-resurreción tiene la fe el fundamento insuperable de su respuesta; pero una deficiente articulación teórica ha convertido el mal en “roca del ateísmo”. Es precisa una nueva visión que, sin ambigüedades teóricas ni fideístas recursos al misterio, trate de mostrar que la esperanza cristiana puede mantener, hoy como ayer –y tal vez mejor que ayer-, el valor de su promesa.
ANDRÉS TORRES QUEIRUGA, profesor de Teología Fundamental en el Instituto Teológico Compostelano, y de Filosofía de la Religión en la Universidad de Santiago, es miembro de la Real Academia Gallega y Director de “Encrucillada. Revista Galega de Pensamento Cristián”. Autor de numerosos libros y artículos, ha publicado en esta misma colección: Creo en Dios Padre (5ª ed.: 1998), Recuperar la salvación (2ª ed.: 2001), Recuperar la creación (3ª ed.: 1998) y Fin del cristianismo premoderno (2001).
Para muchos la condición cristiana se ha vuelto indescifrable. ¿Quién sabe hoy lo que puede distinguir a un cristiano de cualquier persona de bien preocupada por servir al prójimo, respetar las leyes, practicar la tolerancia...: en suma, interesada en vivir de una «vida buena»? El ser cristiano parece disolverse en una cultura y una ética marcadas por unas referencias comunes, hasta el punto de que las diferencias se desvanecen: todos somos parecidos, todos estamos insertados en un mismo tronco... Podría suceder perfectamente que ese tronco resulte ser cristiano, pero más de uno prefiere guardar distancias respecto de tal origen.
Este libro pretende mostrar que la ética cristiana se caracteriza por la libertad de los «hijos de Dios», que viven del «Espíritu» de Cristo. Los cristianos son «del mundo», y Paul Valadier es abiertamente partidario de que todos ellos se interesen en todos los aspectos por la vida de la ciudad terrena y no «huyan» ni desprecien el mundo de los humanos, una vieja tentación muy presente todavía hoy entre la gente religiosa, incluidos los no cristianos. Pero aboga también en favor de que, con la misma libertad, sean capaces de distanciarse y, cuando sea preciso, mostrar su rechazo tanto frente a determinadas leyes religiosas como con respecto a ciertos conformismos mundanos.
PAUL VALADIER, SJ, Doctor en filosofía y en teología, es Director de Archives de Philosophie y Profesor de filosofía moral y política en las Facultades de la Compañía de Jesús en París. Es autor de numerosos libros, entre ellos La Iglesia en proceso: catolicismo y sociedad moderna, publicado en esta misma colección.