Esta obra es un estudio sobre la liturgia y los sacramentos en Santo Tomás de Aquino. Recurriendo a la doctrina tomista de las cuatro causas se ofrece una definición completa de la liturgia. Seguidamente se presenta un tratado de los sacramentos, atendiendo de manera particular al de la Eucaristía. También se atiende a la enseñanza de Santo Tomás en relación con la Liturgia de las Horas y que está dispersa en diferentes obras. El estudio se cierra con una parte dedicada al culto a la Virgen María, los santos y algunos aspectos particulares de la celebración litúrgica.
Hablar de la Virgen María no es hacerlo de una devoción incontrolada. Si uno viene a este libro a buscar un discurso piadoso, no lo encontrará. San Bernardo decía que la Virgen María no necesita de nuestras exageraciones. Los creyentes necesitamos una imagen de María ajustada al significado de su persona. Esta obra expresa en un lenguaje poco convencional el sentido de la figura de la Virgen María en la tradición de la Iglesia.